En 1983, el Gobierno de España implantó la hoy conocida como “tarifa nocturna”. Este cambio fue impuesto como alternativa para permitir al consumidor ahorrar en la factura de electricidad en función del tramo de horas de actividad elegidas. En este caso, las “horas valle” responden al intervalo de horas más baratas de consumo, y las “horas punta” a las más caras.

¿En qué se diferencian las horas punta y las horas valle?

A la hora de profundizar en los dos diferentes tramos de consumo, cabe mencionar qué supone optar por horas punta y horas valle:

  • Horas valle: Es el tramo que engloba las horas entre las 22:00 y las 12:00 horas en invierno y entre las 23:00 y las 13:00 en verano. Durante estas horas, en teoría, se produce un menor consumo de electricidad hasta enlazar con la madrugada, donde el consumo es casi inexistente. Las horas valle permiten una reducción en el precio de la luz ya que alcanza un precio de mayorista al bajar la demanda.
  • Horas punta: A diferencia de las horas valle, las “punta” engloban los horarios opuestos, en concreto entre las 12:00 y las 22:00 horas en invierno y entre las 13:00 y las 23:00 en temporada de verano. El motivo de que la tarifa sea mayor en las horas punta reside en que se trata de los períodos diarios de mayor demanda de electricidad.

La inclusión de las horas valle y las horas punta sirve para equilibrar la demanda eléctrica en un mismo día a través de diferentes tarifas que, en función de la elección del consumidor, se traduce en un mayor ahorro de la factura de la luz.