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La búsqueda de nuevas energías sostenibles no cesa y ya está dando sus frutos, entre las energías alternativas a los combustibles fósiles nos encontramos el aire líquido. Una prometedora fuente de energía que viene a resolver los problemas no solo de contaminación, sino los que nos plantean las renovables, sobre todo en temas de transporte y almacenamiento.
Un medio para almacenar energía, que además permite el transporte de gases como el oxígeno o el nitrógeno de una forma eficiente y segura. Este es el resultado de licuar el aire, tras pasar de estado gaseoso a líquido en el cual interviene un proceso de enfriamiento.
Aunque no se trata de una fuente de energía, su uso favorece el almacenamiento y transporte de la misma, con lo que no se consigue preservar los excedentes de energía no consumidos.
¿Para qué sirve el aire líquido?
Son varios los usos que podemos darle al aire líquido, aunque su principal cualidad es la de almacenar tanto energía como gases, para su fácil transporte. Estos son los usos más frecuentes para los que se utiliza el aire líquido.
Energías renovables | UnsplashUno de los principales usos es el almacenamiento de energía, conocido como LAES (almacenamiento de energía de aire líquido). Un sistema de almacenamiento para los excedentes de electricidad con lo que se garantiza el suministro, aunque no estemos en horas de producción.
El almacenamiento de gases como el gas natural es otra de las funciones que puede realizar de esta forma. En el proceso se debe licuar el gas, para convertirlo en líquido y transportarlo y almacenarlo de una forma sencilla y eficiente. Lo cual además permite su uso como combustible.
Otras de las cosas que podemos hacer con el aire líquido es conseguir Oxígeno puro, este es el resultado de descomponer el aire líquido, obtenemos oxígeno líquido, el cual es muy usado en procesos médicos como industriales.
¿Cómo hacer aire líquido?
Si explicamos de forma sencilla cómo se produce el aire líquido tendríamos que decir que este es el resultado de pasar el aire de su estado gaseoso a estado líquido, este procedimiento recibe el nombre de licuefacción. En el que intervienen dos principios fundamentales de la física, la temperatura y la presión.
Para convertir el aire en líquido implica que podamos usarlo, implica el uso de un proceso industrial, que consta de varias etapas, este proceso es conocido como destilación criogénica. Y consta de los siguientes pasos:
- Purificación y filtración.
- Compresión.
- Enfriamiento.
- Expansión y licuefacción.
- Esto da como resultado una mezcla de Oxígeno líquido y nitrógeno, con un color azul pálido
Ventajas del aire líquido
Además de lo anteriormente comentado, acerca de uso para el transporte y el almacenamiento. Cabe destacar su uso criogénico, una propiedad que favorece su utilización en varias aplicaciones. Estas son algunas de las ventajas de su empleo.
El aire líquido cuenta con un alto rendimiento. En una proporción de 1/700 en la que un litro de aire líquido se traduce en unos 700 litros de aire en estado gaseoso. Lo que la convierte en una forma muy compacta de almacenar energía, ocupando poco espacio.
Sus propiedades de criogenización ofrecen una forma de refrigeración y enfriamiento superior al aire convencional. Al mismo tiempo que es una fuente inagotable de oxígeno y nitrógeno.
Aunque desde el punto de vista del consumidor, se consigue una mejora en las tarifas de la luz, con un mayor aprovechamiento de la energía generada por los diferentes métodos de producción.
Aplicaciones del aire líquido
Las aplicaciones de este son muchas y muy variadas, lo cuales abarcan diferentes sectores industriales, entre los que cabe destacar los siguientes;
Almacenamiento de energía a gran escala. Es la más avanzada y destacada. Donde es utilizado para almacenar la energía excedente para la producción de fuentes renovables. Para consumirlo en aquellas horas en las que no hay producción.
Además, se está explorando la posibilidad de su uso como combustible, con el fin de crear vehículos cero emisiones.
En el campo de la refrigeración y la criogenización, su uso está orientado tanto a la refrigeración industrial como para el enfriamiento de equipos y sistemas. Así como para la congelación de alimentos de forma ultra rápida, preservando el sabor, la textura y las propiedades.
La medicina es otro de los campos en los que destaca, en campos como la oxigenoterapia, la anestesia o los respiradores. Algunos de sus componentes como el nitrógeno líquido es usado incluso en la criocirugía.
También podemos encontrar su aplicación en la industria y la metalurgia, en la fabricación del acero, la inertización, lo cual evita la oxidación y la corrosión, e incluso en las soldaduras.