Gracias a los contadores, las empresas comercializadoras pueden comprobar cuál ha sido nuestro consumo de energía y a través de estas mediciones, emitir la factura correspondiente. Aunque algunas de estas a veces no se ajustan a la realidad, esto sucede en el caso de un mal funcionamiento del mismo e incluso si este ha sido manipulado. Por tanto, hay formas de averiguarlo si te has preguntado cómo puedo saber si el contador está siendo trucado.
En el caso de que el contador no registre de forma veraz el consumo, podemos sospechar que ha sido trucado. Algo que no solo puede usar a favor el usuario, sino que también puede ser la propia compañía la responsable
En ambos casos esta manipulación persigue el beneficio de cada una de las partes. En el caso del usuario, reduce el importe de las facturas, mientras que en el caso del suministrador, su motivación es aumentar el beneficio.
Sea cual sea la naturaleza del fraude y la motivación, existen herramientas con las que comprobar si el contador funciona correctamente o si, por el contrario, ha sido trucado.
¿Qué se considera un contador trucado?
Un contador trucado es aquel que no registra de forma fiable el consumo de energía. Este habría sido manipulado en busca de beneficio. Existen varios métodos con los que conseguir este objetivo. Esta manipulación puede ser física, a través de la realización de puentes para desviar el consumo o utilizar imanes, provocando que se ralentice o detenga el registro. O bien utilizar software para modificar de forma voluntaria las lecturas, para que muestren un importe menor.

Formas de saber si el contador está trucado
En el caso de los contadores digitales, existe la obligación de que sean precintados. Al tratarse de contadores inteligentes no es necesario que accedamos a ellos, solo los técnicos de la compañía están autorizados a acceder a estos.
Una de las formas más fehacientes de asegurar que nuestro contador ha sido objeto de una manipulación es la ausencia de precinto. Este se coloca en el momento de la instalación del mismo. Su ausencia no asegura que el contador haya sido manipulado, aunque suscita dudas.
El importe de las facturas nos ofrece información relativa a los consumos y a partir de estos se puede determinar, si se ha producido este tipo de fraude. Ya que llama poderosamente la atención, aquella figura un consumo elevado, y a pesar de esto el importe es bajo.
Cuando no cabe duda de la manipulación del mismo es cuando nos encontramos con alteraciones reconocibles a simple vista, como puede ser la presencia de cables sueltos y otros indicios.
La presencia de códigos de error en la pantalla de contador, puede ser indicativo de un intento de alteración. Estos son fácilmente reconocibles y dependiendo del código que genere, sabremos la naturaleza del mismo. Los identificamos con las letras Err seguidas de una serie de números.
Consecuencias de tener un contador trucado
Si detectamos anomalías en el contador, debemos informar a la compañía de estas, a la espera de que se tomen las medidas necesarias para determinar a través de una inspección técnica si ha sido objeto de un trucaje o no.
Una vez identificado el fraude, la compañía puede optar por el corte del suministro mientras proceden al cambio de terminal, o solventar los problemas en ellos mismos. Debemos tener en cuenta que este tipo de prácticas además supone un alto riesgo de incendio por sobrecarga e incluso de electrocuciones, qué pueden costarnos la vida.
En el caso de que se determine que se ha producido el fraude, el titular del contrato se enfrenta a consecuencias legales. Las cuales están recogidas en el artículo 255 del Código Penal, Por la Ley orgánica 15/2003 en el cual se castiga con penas de cárcel si el fraude supera los cuatrocientos euros, están van desde los 3 a los 12 meses. Así como sanciones económicas de 1000 a 2000 euros dependiendo del fraude.
Al mismo tiempo que debemos hacer frente al coste de las estimaciones de consumo real con carácter retroactivo, llegando incluso a aplicar cargos.