¿Cómo purgar un radiador y mejorar su rendimiento?

Con la llegada del invierno llegan las grandes bajadas de temperatura, y con ellas, la vuelta de la calefacción. Quizá hayas notado que tus radiadores no calientan tanto como lo hacían el año pasado, o que algunas de sus partes se quedan frías. No te preocupes, esto tiene fácil solución Probablemente solo necesites purgar tu radiador para mejorar su rendimiento. A continuación, te contamos todo lo que necesitas saber sobre este proceso, y qué pasos debes seguir para el correcto funcionamiento de tu calefacción:

Es muy importante que purguemos los radiadores de casa antes de encender la calefacción por primera vez.
Es muy importante que purguemos los radiadores de casa antes de encender la calefacción por primera vez | Unsplash

¿Qué es purgar un radiador?

Quizá has encendido tu calefacción por primera vez este invierno y has notado que los radiadores no calientan tanto como el año pasado. Esto puede ser debido a que, durante estos meses de parón, han ido almacenando aire que está obstaculizando la circulación del agua en su interior. Por este motivo, esta no se reparte de manera homogénea dentro del radiador, y crea cámaras de aire, que impiden que se caliente. También puedes haber notado ruidos extraños como goteos, que no serán más que el movimiento de estas burbujas por el interior. Purgando nuestros radiadores conseguiremos liberar este aire, recuperando así el rendimiento máximo de nuestro sistema de calefacción.

Purgando los radiadores de casa, nos aseguraremos de su correcto funcionamiento durante el invierno.
Purgando los radiadores de casa, nos aseguraremos de su correcto funcionamiento durante el invierno. | Unsplash

¿Cómo purgar radiadores de calefacción?

Ahora es momento de purgar nuestros radiadores. Es recomendable realizar esta acción antes de la temporada de invierno y de encender la calefacción por primera vez. Para purgarlos solamente necesitarás un recipiente, un destornillador y seguir estos pasos:

  1. Enciende la calefacción: espera a que los radiadores de tu casa se empiecen a calentar. Esto puede llevar un tiempo, dependiendo de la potencia de la caldera y el tamaño del domicilio.
  2. Identifica qué radiadores necesitan purgarse: deberás palparlos para localizar zonas frías (siempre con cuidado para evitar quemaduras). Notarás que su parte superior no cogerá tanta temperatura como el resto, o se quedará fría. Esto será debido al aire que tiene en su interior, que tenderá a subir y no dejar fluir el agua.
  3. Apaga la calefacción: el purgado debe llevarse a cabo con la calefacción apagada y los radiadores fríos. Ya que, de lo contrario, corremos el riesgo de quemarnos con el agua que extraigamos del interior del aparato.
  4. Sigue el recorrido natural del agua: primero purgaremos el radiador que se encuentre más cerca de la caldera, hasta llegar a los más alejados.
  5. Coloca el recipiente antes de comenzar el purgado: puede ser un cazo o incluso un vaso grande, de este modo evitaremos llenarlo todo de agua. La llave de tu radiador estará localizada en una de las esquinas superiores del aparato, se trata de un agujero redondo con una pieza cuadrada en su interior.
  6. Gira la llave de tu radiador: si no disponemos de una herramienta especializada para la purga de radiadores, no te preocupes, se puede hacer con un destornillador o incluso una moneda fina. Prepara tu recipiente y gira la llave despacio y con mucho cuidado. Poco a poco escucharás como sale el aire del radiador acompañado de un poco de agua. Es importante que no giremos bruscamente la llave ya que, si nos pasamos, podemos provocar que todo el agua se salga del radiador y causemos una inundación.
  7. Fin del purgado: cuando veas que el chorro de agua es fluido y que no expulsa aire, habremos completado el proceso. Para finalizar, introduciremos de nuevo el destornillador en la llave y cerraremos en el sentido contrario al cual habíamos abierto el radiador. Aprieta fuerte y asegúrate que no gotea.

¿Cómo purgar un radiador antiguo?

Puede que tu casa cuente con bastantes inviernos a sus espaldas y que tus radiadores sean de hierro. Este material fue muy popular en las construcciones españolas de las décadas de ls 60 y 70. El proceso de purgado será prácticamente el mismo, solamente deberás tener en cuenta los siguientes detalles:

  1. La llave de purgado se encontrará siempre en una de las esquinas superiores del radiador. No debes confundirlas con la entrada y salida del circuito del agua que se encontrarán en la parte inferior.
  2. Cuando purgues el radiador, no te asustes si el agua sale muy oscura, es totalmente normal. Sobre todo, el hierro hace que se acumulen muchos óxidos que provocan que el agua salga muy sucia.
  3. Si estos trucos no solucionan los problemas o no te es fácil purgar el radiador, por favor, consulta con un profesional.
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