Los coches eléctricos son el presente, y muchos usuarios ya disfrutan de las ventajas de desplazarse en este medio de transporte sostenible. Tener un coche eléctrico enchufable, además de la inversión que supone su compra, también supone invertir en el cargador. A continuación, te damos todas las claves para la instalación del cargador de tu coche eléctrico.
¿Qué normativa existe para instalar un cargador de coche eléctrico?
Dependiendo del coche eléctrico que tengamos pensado comprar, deberemos instalar un punto de recarga. Los eléctricos enchufables necesitan de estos para recargar la energía de sus baterías, mientras que para los híbridos y no enchufables no nos harán falta, ya que con el propio uso de coche se genera la electricidad suficiente para funcionar y en el caso de no serlo entrará en uso el motor eléctrico. Si tenemos que instalar el cargador debemos cumplir la legislación vigente en este aspecto y seguir las recomendaciones de la normativa en el Real Decreto 1053/2014, de 12 de diciembre, por el que se aprueba una nueva Instrucción Técnica Complementaria (ITC) BT 52 "Instalaciones con fines especiales. Infraestructura para la recarga de vehículos eléctricos", del Reglamento electrotécnico para baja tensión, aprobado por Real Decreto 842/2002, de 2 de agosto.
Se trata de una serie de especificaciones, las cuales debemos seguir para la correcta instalación de los puntos de recarga. En esta se define desde el modo de instalación dependiendo del tipo de garaje individual o comunitario, cómo y dónde instalar los contadores secundarios, los sistemas de alimentación, puntos de conexión y las medidas de seguridad que debemos tomar si queremos hacer uso.
Cómo instalar cargador de coche eléctrico en garaje paso a paso
Instalar un punto de recarga no es algo que podamos hacer nosotros mismos, a no ser que acreditemos ser un profesional con carnet de instalador eléctrico. Partiendo de esta premisa, se deben tomar ciertas consideraciones a la hora de elegir y llevar a cabo la instalación.
En primer lugar, tener claro el lugar de instalación de nuestro punto de recarga, si se trata de un garaje individual o comunitario y si este está en interior o exterior.
Por otro lado, y de vital importancia, es conocer el tipo de conector que lleva nuestro coche. Por el momento y dependiendo del fabricante, tendremos el instalar el correspondiente. Entro los conectores homologados nos encontramos varios tipos:
- Conector Schuko: definidos por el estándar CEE 7/4 se usa para vehículos con necesidades de recarga pequeña, como motos pequeñas e híbridos. Tiene dos bornes y toma de tierra, soportan corrientes hasta 16ª.
- Conector Mennekes: siete bornes. Cuatro para corriente trifásica o monofásica (3 fases y el neutro). El borne toma tierra y dos para comunicaciones de control de parámetros de carga. Permite carga monofásica de hasta 16A y carga trifásica de hasta 63A.
- Conector Scame: 5 o 7 bornes, para corriente monofásica o trifásica, la toma de tierra y las comunicaciones de red. Admite hasta 32A.
- Conector CHAdeMO: Cargas ultrarrápidas en corriente continua, que se usan habitualmente en electrolineras.
- Conector CSS (Combined Charging System): Tiene 5 bornes, para corriente, protección a tierra y comunicaciones. Para carga rápida, aunque también podemos usarlos en la carga lenta.
Una vez conocemos el tipo de conector debemos tener en cuenta el modo de recarga, este viene definido en la norma IEC-61852, por el cual encontramos cuatro tipos distintos, estos vienen definidos por el tipo de conector. En el caso de Schuko, debemos implementar el modo 1 o 2. El modo tres es compatibles con los conectores Schuko, Mennekes y Scame. Mientras que el modo 4 es para cargas rápidas con conectores CHAdeMO y COMBO.
Por otro lado, está la potencia, y esta influye en el tiempo de carga. A menor tiempo de carga mayor potencia, además la carga rápida necesita de una instalación específica que encarece considerablemente el precio, tenemos 4 velocidades de recarga en función de la potencia:
- 3,6 kW. Carga lenta. Tiempo de recarga aproximado sobre las 10h
- 7,2 kW. Carga semi-rápida. Tiempo de recarga aproximado sobre las 6h
- 22 kW. Carga rápida. Tiempo aproximado de recarga sobre los 1h 30 min
- 50 kW. Carga ultra-rápida. Tiempo de recarga aproximado sobre los 20 min.
Cada usuario de un punto de recarga individual tiene que tener su propio contador y ajustarse a la normativa de instalación española ITC-BT-52. En el caso de las viviendas unifamiliares esto no es necesario, ya que se conectaría al contador individual de la propia vivienda. En el caso de los parkings comunitarios la cosa cambia y hay que comunicar a la comunidad de vecinos nuestro interés y asumir el coste de la instalación. Instalando un contador secundario con el que poder calcular el gasto con el fin de abonar a la comunidad. Otra opción es la instalación de puntos de recarga compartido haciendo necesario el uso de tarjetas RFID identificativas.
Los sistemas de protección son muy importantes a la hora de la instalación, estos puede que no estén incluidos en las cajas o portes eléctricos. Es de obligado cumplimiento que nuestra instalación disponga de protección diferencial tipo A y magnetotérmico Curva C adecuado para la potencia, además de protección por sobretensiones permanente + transitoria.
Por norma general, para hacer una instalación no es necesario proyecto a no ser que estemos frente a instalaciones mayores de 50 kW de potencia, exteriores superiores a 10kW de potencia, instalaciones para el modo 4 de recarga o ampliaciones de instalaciones que ya requerían proyecto inicialmente si se amplía en 50% la potencia del proyecto anterior. (RDL 647/2011).
¿Cuál es el coste?
El coste de las instalaciones puede variar mucho, ya que son muchos los factores a tener en cuenta. Puede oscilar entre los doscientos o trecientos euros para las instalaciones más baratas y sencillas. Hasta alcanzar más de mil quinientos euros para las más complejas. Por lo que si estamos interesados en la instalación lo más recomendable es pedir varios presupuestos, teniendo en cuenta nuestras necesidades.
¿Existen ayudas para la instalación?
Dependiendo de dónde vivamos y el tipo de instalación estas pueden cubrir hasta el 70% del importe de la instalación. Dependiendo de cada comunidad autónoma tanto las cuantías como los requisitos son distintos, por lo que si estamos interesados en solicitar alguna de estas ayudas debemos consultar las bases y disponibilidad en nuestro lugar de residencia.
