El efecto fotoeléctrico tiene un origen químico. Se trata de un fenómeno que tiene lugar cuando los fotones de carga electromagnética que se encuentran en las partículas de luz chocan contra un material. Además, producto de ese choque se produce un movimiento de sus electrones.
Si el brillo de la luz se produce en un metal, el efecto fotoeléctrico tiene lugar porque los electrones son expulsados producto de este impacto con el material metálico. Aunque en este caso, los nombres pueden cambiar y a esos electrones expulsados se les puede llamar fotoelectrones y al fenómeno en sí fotoemisión en lugar de efecto fotoeléctrico.
El efecto fotoeléctrico fue descubierto por Heinrich Hertz en 1887 y actualmente ha cobrado una gran importancia porque forma parte del principio de funcionamiento de las placas solares. Esto se produce porque para que los equipos de placas solares rindan debidamente las partículas de luz tienen que chocar directamente contra una superficie que sería la propia placa. Gracias a la función del efecto fotoeléctrico, las placas pueden convertir la electricidad en corriente continua.
Aunque el uso del efecto fotoeléctrico se asocia a las placas, hoy en día también se emplea en otros instrumentos como las fotocopiadoras, en los medidores de luz o en diferentes componentes electrónicos.
Cuando se produce el efecto fotoeléctrico
El efecto fotoeléctrico es un fenómeno que técnicamente se produce cuando una onda electromagnética, de una única gama cromática, y que tiene una longitud muy corta, choca sobre una superficie metálica. La radiación generada por este choque se absorbe y esa superficie metálica genera electrones.
De un modo más práctico, el efecto fotoeléctrico se produce cuando una luz brilla sobre un metal. Los electrones que expulsa ese metal son los que dan nombre al fenómeno del efecto fotoeléctrico, que también es denominado como fotoemisión. Mientras que los electrones que quedan expulsados del metal son llamados fotoelectrones.
Diferencia entre efecto fotoeléctrico y fotovoltaico
La diferencia entre el efecto fotoeléctrico y el fotovoltaico se localiza en la definición de ambos fenómenos. El efecto fotoeléctrico es un proceso a través del cual se liberan electrones a causa del choque de una luz sobre un metal. Por su parte, el efecto fotovoltaico, es un procedimiento que se genera por la diferencia de potencial ubicada entre dos puntos de un material cada vez que una radiación electromagnética incide sobre él.
Aplicaciones del efecto fotoeléctrico en la vida diaria
El efecto fotoeléctrico está presente en muchos elementos de la vida diaria. Un ejemplo claro es el de las cámaras. Pero también es esencial en los dispositivos que controlan los tiempos de exposición. Por otro lado, este fenómeno tiene una presencia muy destacada en los detectores de movimiento o en elementos de uso común como el alumbrado público.
Otros usos del efecto fotovoltaico se ven en los reguladores de tóner que forman parte de las fotocopiadoras, también está presente las celdas solares que son muy relevantes en los satélites o en el funcionamiento de las calculadoras de uso cotidiano. Tampoco pasa desapercibida su utilización en el estudio del fenómeno nuclear o en el análisis químico que se realiza sobre los materiales al tener en cuenta los electrones que emiten.