También conocida como “depósito de garantía eléctrica”, la fianza de energía eléctrica es, como su nombre indica, un desembolso ante la exigencia de una distribuidora al consumidor final de un servicio de suministro eléctrico como seguro de pago. Este depósito, generalmente, es solicitado por la distribuidora a través de la comercializadora.
A la hora de calcular el precio de la fianza de energía eléctrica deben tenerse en cuenta dos aspectos:
- Si la comercializadora existe en el mercado durante un período inferior a un año:
- Consumidores de baja tensión: La cantidad de la fianza se corresponde con 50 horas de consumo con la potencia contratada.
- Consumidores de alta tensión: El depósito de garantía se corresponde con la tarifa de una factura mensual calculado en base al 40% de la potencia contratada.
- Si la comercializadora cuenta con más de un año en el mercado, el depósito se calcula a través de la división de la tarifa anual del consumidor entre 365. Después, el resultado se multiplica por aquellos días del período de liquidación del contrato de acceso, siempre en un período máximo de 30 días.
¿Se devuelve la fianza de energía eléctrica?
La fianza de energía eléctrica siempre se devuelve una vez se solicite la baja del suministro. En este caso es la distribuidora la que devuelve el depósito al consumidor de forma directa.
¿Por qué se exige la fianza eléctrica?
Hay dos motivos que explican la exigencia de la fianza eléctrica. El primero de ellos es que actúa como garantía de pago. Este depósito sirve de medida de presión de la distribuidora que busca tener la seguridad de que el cliente va a cumplir con sus obligaciones económicas.
Por otro lado, actúa como protección ante un posible impago, este dinero cubriría los costes que se generan cuando los clientes no efectúan sus pagos correspondientes en tiempo y forma. Finalmente, se emplea como medida antifraude que evita que se haga un uso ilegal del consumo eléctrico.
¿Cómo funciona la fianza de energía eléctrica?
El funcionamiento de la fianza de energía eléctrica se activa cuando el consumidor realiza un alta nueva, incrementa la potencia contratada o restablece un servicio que ya tenía contratado. A partir de aquí se dan cuatro pasos muy marcados.
- Solicitud de la fianza por parte de la empresa distribuidora.
- Cálculo de la cuantía de la fianza: la distribuidora establece la cifra de la fianza tomando como referencia factores como la potencia contratada y el consumo estimado.
- Abono de la fianza: el consumidor efectúa el pago de la fianza a través de un cargo único que se aplica en la primera factura. Aunque legalmente la compañía puede solicitar el pago de este depósito hasta 6 meses después de la fecha de alta.
- Devolución: cuando el contrato llega a su fin, la distribuidora devuelve el depósito, a no ser que el cliente tenga una deuda contraída con la propia distribuidora.
¿Se puede evitar la fianza?
Evitar el pago de la fianza de energía eléctrica es imposible. Eso se debe a que se trata de un requisito obligatorio solicitado por todas las distribuidoras que necesitan una garantía de pago. Aun así, esto no evita que se pueda obtener un servicio económico como la tarifa fija de Pepeenergy, que, entre otros aspectos, destaca por no tener permanencia. Además, la tarifa mensual es revisada cada 6 meses.
