El término radiación solar se emplea para designar a la energía que emite el sol y que llega a todos los puntos del planeta a través de ondas electromagnéticas. La radiación solar es un elemento fundamental para el desarrollo de la vida en la tierra, ya que influye directamente sobre determinados procesos como el de la fotosíntesis en las plantas. Además, guarda una relación directa con el clima, con las temperaturas que pueden tener lugar en una determinada zona del planeta y con la formación del viento.

Hoy en día la radiación solar se puede medir empleando una unidad de potencia. Para ello se emplea un sensor de radiación que registra los datos en vatios por metro cuadrado. Además, las medidas que se registran se averiguan haciendo una media de los datos recogidos en intervalos de tiempo que oscilan entre los 10 minutos y las 24 horas. Otro aspecto importante es que para tomar medidas correctas y certeras es necesario colocar este sensor en un lugar en el que no haya sombras y que preferiblemente esté orientado hacia el sur.

Tipos de radiación solar

Actualmente, se pueden encontrar hasta tres tipos de radiación solar. La primera modalidad se caracteriza por traspasar la atmósfera y llegar a la superficie terrestre sin verse afectada por ningún agente externo y recibe el nombre de radiación solar directa. Otro tipo es la radiación solar difusa que llega a la tierra, pero después de haber sido desviada en varias ocasiones y por diferentes elementos. Finalmente, se encuentra la radiación solar reflejada, que es la que refleja la propia superficie de la tierra creando el efecto albedo.