La resistencia eléctrica es la oposición al flujo de corriente en un circuito eléctrico. La resistencia convierte la energía eléctrica en energía térmica y, en este sentido, es similar a la fricción mecánica, ya que disipan la energía eléctrica en forma de calor.
Comportamiento de la resistencia eléctrica
La resistencia eléctrica se comporta de forma diferente en función del tipo de corriente:
- En corriente continua: Su comportamiento se traduce en la transformación de energía eléctrica en calor a través del conocido como efecto Joule, representado por una resistencia en ohmios como unidad de potencia.
- En corriente alterna: Se alterna entre extremos negativos y positivos a 60 veces por segundo, siendo la potencia el resultado de un valor promedio.
¿Cómo funciona una resistencia eléctrica?
El funcionamiento de una resistencia eléctrica se basa en hacer de obstáculo del flujo de electrones que se desplazan por un conductor. La importancia de este elemento en la instalación eléctrica recae en que su presencia influye en la cantidad de corriente que puede atravesar un circuito.
El fenómeno que genera la resistencia eléctrica se establece por la Ley de Ohm, que indica que la resistencia es igual a la división entre el voltaje y la corriente. Todo esto indica que cuando se aumenta la resistencia de un circuito, la corriente disminuye, a pesar de que los valores del voltaje se mantienen estables.
Por otro lado, en la función de la resistencia como obstáculo para el flujo de electrones intervienen diferentes aspectos. Algunos de los más reconocibles son la longitud, la temperatura o el tipo de material. Un ejemplo claro es el de los metales que presentan niveles muy bajos de resistencia. Mientras que el caucho aumenta la resistencia.
¿Cuáles son los tipos de resistencia eléctrica?
A día de hoy se localizan dos tipos de resistencia eléctrica que tienen en cuenta técnicos y usuarios. Pero una de ellas presenta dos subtipos. Por un lado, aparece la resistencia lineal. Esta modalidad de resistencia es variable y cambia debido a factores como el voltaje o la temperatura que se le aplica.
En el otro punto se encuentra la resistencia no lineal en la que la corriente no cambia en base a la Ley de Ohm. Pero, a partir de aquí, surgen dos subtipos, uno de ellos es la resistencia fija en la que los valores se mantienen y otro la resistencia variable. En este caso los valores varían en función del lugar en el que se encuentre el contacto deslizante.
¿Cómo se mide la resistencia eléctrica?
La unidad de medida que se emplea para registrar este valor es el ohmio. Además, al hacer estas mediciones todo parte de la base de que cuanto mayor es la resistencia, más alto es el valor representado en Ohmios.