El voltímetro es un dispositivo diseñado para medir las diferencias de potencial que se localizan entre dos puntos de un circuito eléctrico. La inmensa mayoría de los voltímetros tienen capacidad para realizar estas mediciones en un gran número de dispositivos eléctricos. Además, pueden registrar medidas de corriente continua, de la propia resistencia, de los transistores e incluso pueden probar las baterías.
El voltímetro ejecuta su proceso registrando la carga eléctrica positiva que circula por un punto del circuito eléctrico. Seguidamente, mide la carga negativa que se localiza en otro punto. También hay que destacar que el voltímetro forma parte de aparatos eléctricos que se pueden encontrar en artículos que se utilizan en la vida cotidiana, como ocurre con el coche. En este caso, el voltímetro mide el voltaje que se encuentra en los dos terminales de la batería del vehículo para asegurarse de que su sistema eléctrico funciona con todas las garantías.
Tipos de voltímetros
Existen dos tipos básicos de voltímetros. Por un lado, se encuentran los analógicos que miden aspectos como la tensión, la corriente, la frecuencia, la potencia de la señal o la resistencia. Además, uno de los rasgos de los voltímetros analógicos es que evolucionan y mejoran sus versiones contando con elementos como el condensador, el diodo, los modos de prueba o los circuitos integrados. Otro aspecto importante de esta modalidad de voltímetros es que tienen más precisión a la hora de comprobar los diodos que los voltímetros digitales.
Por otro lado, se encuentran los voltímetros digitales. Estos dispositivos se caracterizan por ser altamente precisos al calcular aspectos como la tensión, la corriente o la resistencia. Además, se trata de una precisión que supera a la de los analógicos porque tienen una pantalla LCD que muestra hasta los decimales de los dígitos medidos. También son dispositivos que se pueden ajustar para medir ohmios, voltios y amperios.
