Una factura de la luz se conforma de diferentes elementos que no siempre alcanzamos a descifrar. Y uno de ellos son los conocidos como peajes de acceso (también llamados tarifas de acceso).
Un término que engloba el “servicio” de transporte de energía desde una central hasta nuestros hogares. El precio de estos peajes es fijado por el propio gobierno y representa hasta un 40% de la factura media, generalmente.
Tipos de peajes de acceso
Actualmente existen diferentes peajes de acceso en función del servicio:
- Electricidad: El peaje de acceso conocido como 2.0 es el más recurrente, ya que se corresponde con el de la mayoría de los hogares españoles (una potencia inferior a 10 kW). Existen tres tipos diferentes de esta tarifa en función de la discriminación horaria. Así, además del peaje de acceso 2.0, los siguientes más conocidos y usados son el 2.1 (entre 10kW y 15kW) y el 3.0 (superior a 15kW).
- Gas: En el consumo de gas se tiene en cuenta el consumo anual y no la potencia contratada, por lo que aquí las tarifas de acceso se dividen en 3.1 (consumos anuales inferiores a 5.000 kWh) y 3.2 (entre 5.000 y 50.000 kWh por año).
