La constante de facturación se refiere al valor o la cifra que se obtiene al multiplicar las indicaciones del integrador de energía o potencia con el objetivo de conocer el consumo de energía o la potencia que se ha utilizado. Se trata de uno de los números que se podrán reflejar en la factura de la luz, por lo que será muy importante conocerlo para entender bien la facturación eléctrica.

¿Dónde podemos encontrar la constante de facturación?

Dentro de una factura de la luz hay dos valores que hay que tener en cuenta: el fijo, que aborda la potencia que se acordó en el contrato con la compañía eléctrica; y, el variable, que señalará la cuantía que cambia según el consumo de electricidad dentro de la vivienda, oficial o local industrial.

Además de estos dos valores, también se encontrarán dos constantes de facturación que no varían, que son los impuestos que se deben pagar por tener un suministro energético, el alquiler del contador de la luz instalado en nuestra vivienda, local, oficina o establecimiento, y otros cargos que deberán de reflejarse a la hora de firmar nuestro contrato con la empresa que suministra la luz.

¿Cómo se calcula la constante de facturación?

En este sentido, destaca la aplicación de constantes de facturación como los impuestos eléctricos fijados por el Gobierno a través del Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital. Este valor se aplica mediante una multiplicación a la cifra que se obtiene de la suma del importe del término fijo (potencia contratada) y el consumo.

Por otro lado, también destaca el Impuesto de Valor Añadido (IVA) como constante de facturación. Este valor es de un 21% para la electricidad y también se multiplica con el valor final de consumo del establecimiento o vivienda.